Fernando Martín Hernández es un empresario y emprendedor Argentino. Es mentor y comunicador, y escribe rutinariamente sobre emprendedurismo, desarrollo territorial, liderazgo y motivación en medios, portales y en su LinkedIn donde publica su columna:
“hablemos de emprendedurismo.”
Como emprendedor, conoce fervientemente el desafío de emprender. Dice ser, en cierto modo, el reflejo de una familia empresarialmente emprendedora. Si bien, como en todos los casos, los integrantes son tan variados como las profesiones, se nutrió de experiencias que sumaron a su capital humano emprendedor.
Mientras avanza la nota, me cuenta los dones comerciales que considera haber adquirido de su familia materna, donde se valora la comunicación honesta y sincera. Expresa con un aire poético en sus palabras, cuando se enteró que su bisabuelo materno, a parte de otros negocios y emprendimientos, obtuvo licencia para instalar el primer surtidor de combustible abastecido por YPF en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, más exactamente, en el Mataderos. Su abuela materna de aparadora de Grimoldi a emprendedora de marroquinería. O su abuelo, el primero en poner los carros fabricando pochoclos y manzanas acarameladas en los parques de Villa Urquiza.
“Era literalmente un surtidor, donde los camioneros y vecinos de la zona se abastecían. No había drugstore, ni se vendían diferentes tipos de combustible, no conseguías ni alfajores, ni chicles, ni café. Solo nafta.”
De su familia paterna, aunque el vínculo era diferente, considera haber heredado la pasión por la industria y la comunidad empresarial. Fábricas metalúrgicas funcionando tres turnos, patentes industriales, exportación e importación, y licencias de aún hoy reconocidas marcas, son las que también lo inspiran.
“Cuando mis abuelos paternos fallecen, el vínculo familiar se rompió fácil. Las fábricas se vendieron. Pero las anécdotas son varias. De chico solía pasar tiempo en la casa familiar, aunque mi vínculo paterno era casi nulo. Mi abuelo fue un reconocido e importante empresario industrial de los años 70 en el círculo industrial fabril. Hay algo en la industria que me genera una energía transformadora.”
Como no podía ser de otra forma, y aunque pasó por diferentes puestos en lo privado, a los 17 años ya comenzaba su primer emprendimiento. Así comienza su segundo libro el cual fue editado en diciembre de este año: PROHIBIDO EMPRENDER | Un Relato Inspirador.
Prohibido Emprender es un libro recomendado por y para emprendedores con una mirada optimista, realista, motivadora e inspiracional.
“Siempre me gusto escribir y comunicar. No me considero un experto, sino, alguien que con resiliencia supo capitalizar las experiencias del fracaso, de haberlo perdido todo y recuperarlo.
De creer realmente que lo bueno es posible, y que la diferencia entre decir y hacer es el resultado. Hay fórmulas, pero no son mágicas. Me capacité, y sigo estudiando obteniendo certificaciones, licencias y asistiendo a cursos que nos ayudan a quienes no tuvimos otras oportunidades a ser mejores día a día.”
El libro cuenta con un índice interesante, tal vez algo diferente a lo que solemos ver.
Comienza con un post reflexivo, agradecimiento, un pensamiento base, y una carta al lector. Luego, continúa con un capítulo inicio para seguir con ocho capítulos principales y un capítulo fin. Sumado a esto, un extra de recomendaciones, pensadores, escritores que se citan y hasta series del ecosistema emprendedor que fueron inspiración para el autor.
Para la publicación del ejemplar, no buscó del apoyo de una editorial. Y no solo realizó el diseño y arte de tapa, diseño interior, trabajo de imágenes y demás, sino que, registro una editorial, los derechos de autor en DNDA, los registros de las marcas en INPI, dominios; solicitó el ISBN en los organismos correspondientes y realizó todos los trámites de forma online y personal. Al igual que con su primer libro: RIMARISMO occioriente. tercerizo el labor de impresión.
“Me capacité y leí los tutoriales y notas legales de cada uno de los trámites. Quise darme el gusto de hacer todo lo que podía por mis propios medios.”
Pero hubo algo que me sorprendió por demás: La revisión, lectura y corrección, ¿también lo hiciste vos?
La revisión, ampliaciones, y correcciones ortográficas, gramaticales, entre otras, fueron aplicadas mediante la utilización de herramientas libres de AI.
“En medio de los casi 12 largos meses que me llevó escribir-borrar, de leer-releer, se lanzó la famosa Inteligencia Artificial. Un día le cargue el texto y le pedí opinión. Otro día le pedí por favor si podía generar una corrección. Y un día le cargue todos los capítulos, le cargue el libro completo y le pregunté qué opinaba del mismo. Si bien la efectividad depende de la capacidad de saber pedir y preguntar, realmente es una herramienta increíble, aunque no suplanta la revisión de calidad humana. Ni lo recomiendo, ni dejo de hacerlo. Creo que así como existen excelentes páginas web gratuitas de correctores online, existe una capacidad en la AI notable.
Pero, se nota un texto escrito con pasión, y uno escrito con AI. Que te acomoda textos y relatos de forma rápida y sencilla, o que te brinda información relevante y ampliación, no hay duda.
Creo que en un futuro será algo sumamente diferenciador e intuitivo, tal vez ya lo es, pero aún falta.”
En el desarrollo de los capítulos nos vamos a encontrar con técnicas, herramientas, conocimientos, teorías propiamente formuladas como: -taoemprendedurismo- y -teoría e2-que aplican de forma directa con ejemplos al mundo emprendedor.
También encontraremos anécdotas personales con referentes y colegas, citas, pensamientos, y una gran verborragia para reflejar parte de su vida privada y personal familiar como puede verse especialmente en los capítulos uno, dos, siete y ocho; pero sobre todo en el seis (Perder, temer, creer y emprender), que comienza así:
“Cuando estás a punto de quedarte literalmente en la calle con tu mujer y dos hijos, te preguntás si realmente estás haciendo bien las cosas. Y podés estar tranquilo, que si no te lo preguntás vos, vienen otros a confirmarlo.”
En este capítulo cuenta como después de perderlo todo, la resiliencia y la pasión, más una variedad de herramientas y condiciones, son la clave para no solo recuperar lo perdido, sino, ganar lo inimaginado.
Algo que me pareció interesante, son los códigos QR que nos llevan de inmediato a las imágenes de post o citas de autores y publicaciones en las cuales se hace referencia. Como por ejemplo: una entrevista personal para el programa “Ventas Imposibles” conducido por Gonzalo Otálora- experto en Storytelling, Storyselling y Pitch de Latinoamérica. Al escanear el código, nos lleva directo al canal para en el caso deseado poder ver la entrevista completa.
El libro, de 188 páginas, es un ejemplar de lectura “liviana”, incluso, la novela por así decirlo, está bien enfocada y relajadamente incorporada a los capítulos que cuentan con más tecnicismos que relato en sí.
El autor nos cuenta que más que empresario se considera un apasionado emprendedor y que su intención era no solo contar parte de su historia y su realidad, sino, intentar dar aporte a la comunidad con herramientas reales mediante las experiencias vividas.
Una frase propia que, el mismo reconoce de cabecera, es el título de uno de sus capítulos:
“La diferencia entre decir y hacer es el resultado.” No es para nada casual que sea este el capítulo 8, el cual da lugar a el capítulo “fin” del libro que tiene solo cuatro páginas con un mensaje motivador y alentador. No quiero espoilear nada, pero realmente te deja pensando.
En el avance de la lectura podemos encontrar un claro deseo del acceso de la comunidad en sí al emprendedurismo. Podemos ver su extensa confianza y agradecimiento a su amigo, a su mentor y a su padrino de vida. Sumando a estos sin duda, su familia, el apoyo de su mujer, sus hijos, y sus valiosos abuelos maternos. Denota que le es muy importanteel respeto, el ser humilde en su accionar, ser agradecido, y valora la intuición como herramienta clave y guía.
También se puede apreciar cierto dejo de rencores y situaciones que mediante el desarrollo del texto y el paso de páginas pareciera él mismo intentar sanar. El dolor expresado en palabras puede ser una buena herramienta de sanación y claramente no duda en usarla.
En Prohibido Emprender, el autor intenta mediante la narrativa en primera persona de situaciones personales y vivencias extremas, aplicar técnicas, herramientas y teorías que pueden servirle al lector como herramienta inmediata o futura para su camino emprendedor. No obstante, su lectura no aplica solo a emprendedores, ya que hay un mensaje inspirador de darle sentido a la vida, comprendiendo de que: “Aquí estamos, no elegimos nacer, o sí, pero aquí estamos. Vivir, de alguna forma, es emprender, y eso nos hace a todos grandes emprendedores.”
Del camino de la acción, la perseverancia; del no dejarse vencer por las dificultades, de aprender a manejar la frustración, de aceptarse a sí mismo, de valorar los errores y aprender de los fracasos, de hacer que sucedan las cosas que realmente importan en tu vida; de eso habla este libro.
Como finaliza el autor: “Porque no es suficiente estar vivo; suficiente, es sentirse vivo.”